jueves, 26 de julio de 2012

Vuelta al entreno 1 - El descanso

Como a la mayoría de deportistas, siempre he tenido muchos problemas para guardar reposo en caso de molestias y/o lesión, y ni hablemos de obligarme a descansar sin necesidad alguna! Yo, que me he arrastrado renqueante por las vacías calles a las 5:00 a.m... ¿voy a descansar sin motivo? ¿y perder mi "fabulosa" forma física? Bah!!!

Pero claro... escuchas a éste y a aquel, esos que hacen sus más lentos rodajes de calentamiento a mi ritmo de MMP en 3000 como se toman un mes entero (si no dos) de descanso total y absoluto y piensas "mmm... tal vez sea eso... ¡si! ¡Seguro que ese descanso tiene algo que ver!"

Una vez hecho de tripas corazón y de enarbolar estandartes con frases de autoconvencimiento tipo "hace falta dar un paso atrás para dar tres adelante", me decido, y doy la zancada más dolorosa de toda la temporada...

... y siempre que lo he hecho, pienso en lo maravilloso que será ver como mi cuerpo, al que siempre le duele algo, se regenerará cual cola de lagartija, y como comenzaré la nueva temporada como si fuese una suerte de Evander Holyfield con más juego de cadera, renovado, con su oreja completa, indestructible y, como Terminator, sin saber lo que es el dolor. Pero no...

La primera semana me la paso pensando en qué debo haber hecho para que me duela más la zona del popliteo que en la semana de mayor kilometraje de todo el año, en con qué me habré golpeado para que el psoas me duela así, y en que si el estrés del trabajo me está dejando más cansado que mi tirada más larga.

Desconozco si hay estudio al respecto... Supongo que si, pero mi teoría es que nuestro cuerpo se queja, nos hace sentir el dolor, y cuando seguimos empeñándonos en entrenar y entrenar, siempre y cuando no haya lesión, empieza a segregar esas cosas maravillosas llamadas dopaminas, endorfinas, y demás nombres de chuches. En cuanto nos tomamos un descanso, nuestra carcasa piensa: Y ahora...¿pa qué?, y nos cierra el grifo. Es entonces cuando empezamos a sentir todo lo que estaba enmascarado. Convincente, ¿eh? pues no tengo ni idea de que es así, pero si no... ¿qué otro consuelo me queda para pensar en que he perdido mi "maravillosa" forma física y que he ganado unos cuantos achaques?

3 comentarios:

  1. Genial reflexión sobre lo que nos cuesta eso de "descansar".
    La clave es adaptarte a lo que toca, y ahora es cuando tienes que plasmar todo lo que has pensado mientras descansabas..
    Estoy seguro que será tu mejor temporada hasta la fecha. Y yo que quiero vivirlo en la pista contigo, amigo, entrena a tope!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y yo que espero lo mismo, amigo! Disfrutarlo tal y como empezamos en ésto, juntos!

      Eliminar
  2. Interesante blog. Interesante reflexión.

    Saludos marchador!

    ResponderEliminar